“Doctor, me duele la cintura. Algún problema en la cadera será” o “No puedo ni atarme los zapatos, ha de ser una lesión de espalda”. Afirmaciones como estas son las que con frecuencia reciben los especialistas para atender las molestias ocasionadas por lesiones en cadera y espalda.
Pero, ¿por qué es necesario distinguir los síntomas antes de acudir al médico?
Siga leyendo que aquí le contamos cómo y por qué es importante hacerlo.
La cadera, soporte del cuerpo
La cadera es la articulación más grande del cuerpo, dónde se unen el hueso del muslo (fémur) con la pelvis. Tiene dos partes principales que son: la bola del extremo del fémur y la cavidad de la pelvis.
La cadera es la articulación que permite enlazar el tren superior con el inferior, por lo que debe soportar un gran peso y facilitar un amplio rango de movimiento. En esto, radica la importancia de la misma en el cuerpo humano.
Cuando existe una lesión en esta articulación, se manifiesta con dolor principalmente en la ingle que se irradia como un ‘río’ hacia la rodilla.
Según el Dr. Norberto Báez, cirujano ortopeda y especialista en reemplazo de rodilla y cadera: “Los problemas de cadera se reflejan sobre la ingle y la parte superior de la rodilla. Además, cuando se padece artritis severa en la cadera, hay movimientos que resultan complicados de realizar, como elevar las rodillas a nivel de cintura, flexionar la cadera o bajar y subir escaleras”.
También es posible que le acompañen síntomas como:
- Dificultad para ponerse las medias y/o zapatos.
- Cruzar las piernas.
- Problemas para ingresar al auto o a la bañera.
- Inconvenientes para doblarse.
En la opinión del Dr. Norberto, si el dolor se dispersa más hacia el costado de una pierna, es más probable que se deba a una bursitis de cadera, que es la inflamación de los músculos y tendones cuando se friccionan con el fémur.
La espalda y su poder multifuncional
Por otra parte, tenemos la espalda, que es la región del cuerpo que se ubica entre el cuello y los glúteos. Esta comprende la columna vertebral y dos compartimientos para los músculos intrínseco y extrínseco.
La espalda tiene múltiples funciones: sostiene el cuello y la cabeza, ajusta los movimientos de las extremidades superiores e inferiores, protege la médula espinal, entre otras.
En los casos en los que se tienen problemas en la columna u otra parte de la espalda, los síntomas más habituales son dolor en la espalda baja que se dispersa hacia las piernas y glúteos, y algunas veces se extiende a los pies.
Otras molestias son:
- Dolor punzante en el área afectada.
- Molestias en la parte posterior de las piernas.
- Limitación de la movilidad (flexibilidad).
- Hormigueo.
Esto se debe a que, es usual que se presente una afección llamada Sacroileitis, que es la inflamación en la unión sacroilíaca, dónde se encuentran el hueso sacro y los coxales.
Lo mismo indica el Dr. Báez: “Cuando el paciente presenta dolor en la parte de atrás de la cadera, es porque existe una afección en la unión sacroilíaca (conexión del hueso sacro con el íleo o coxal), ya que si se inflama puede provocar dolor y la degeneración de la articulación”.
También apunta que, a diferencia de una condición de caderas, una de espalda produce dolor hacia la parte posterior de las piernas, porque afecta directamente el nervio ciático.
¿Por qué se confunde la lesión de espalda?
Muchos nervios que se originan en la espalda también pasan por la cadera, por lo que, si hay algún problema en estos, se irradia dolor hacia la cintura y se tiende a confundir con síntomas de artrosis de cadera.
Y cuando son lesiones de cadera, también se suele pensar que por el hecho de no poder doblarse ni realizar algunos movimientos específicos, se debe a complicaciones en la columna.
La importancia de diferenciarlo
Distinguir una afección de otra, le permitirá identificar a qué profesional necesita dirigirse para obtener un diagnóstico más certero. Si requiere un quiropráctico, un fisiatra o un médico ortopedista que evalúe con mayor precisión su caso.
Necesidad de Diagnóstico
Es importante saber que, lo más recomendable es acudir a un profesional de la salud que le ayude a identificar mejor el problema e indicarle el tratamiento más idóneo para su condición.
Así que, antes de acudir al médico, trate de reconocer y diferenciar los síntomas asociados a la lesión de espalda o molestias que presenta. De esta forma, le dará pistas al especialista para determinar más rápido lo que necesita.
Si usted requiere ayuda para estos casos, no dude en comunicarse ahora mismo a través de nuestras líneas: (787) 805-4949, (787) 892-3360, (787) 892-8822, (787) 831-0181.
El Dr. Norberto Báez le ayudará a identificar su problema y le guiará en su proceso de recuperación.