La cirugía de reemplazo de rodilla suele ser necesaria cuando la articulación de la rodilla está desgastada o dañada, produciendo una movilidad reducida y dolor incluso en reposo que puede solucionarse con una prótesis en la rodilla.
¿Cuándo necesito una prótesis en la rodilla?
El Dr. Norberto Báez Ríos, es especialista en Reemplazo de Rodillas, Caderas y Cirugía Ortopédica Reconstructiva. Su indicación primaria para recomendar esta cirugía es ante la presencia del desgaste del cartílago que es difícil de revertir y, por ello, la solución protésica puede ser una opción en los casos más avanzados.
Un reemplazo de rodilla es una intervención que solo se recomienda si otros tratamientos como antiinflamatorios o inyecciones no han ayudado a reducir el dolor o mejorar la movilidad.
La razón más común para la cirugía de reemplazo de rodilla es la osteoartritis. Otras condiciones que causan daño en la rodilla incluyen:
- Artritis reumatoide
- Hemofilia
- Displasia ósea (enfermedades óseas que causan deformidad)
- Necrosis avascular (muerte de hueso en la articulación de la rodilla después de problemas de suministro de sangre)
- Traumatismos
Los resultados son excelentes, y en la mayoría de los casos se logra eliminar el dolor y devolver a la persona a su nivel de actividad previo. Estas prótesis suelen durar entre 8 y 15 años, aunque este tiempo es muy variable y dependerá del “uso” que se le dé.
Además, cuanto más edad tenga el paciente, más dura la prótesis, ya que una persona de más edad tiene habitualmente menor actividad que una joven.
¿Cómo son las prótesis de rodilla?
Una prótesis de rodilla es la sustitución de la articulación por una pieza sintética, a través de una intervención quirúrgica. Este elemento mecánico está compuesto por diversos componentes de metal y/o plástico que sustituyen a la articulación de la rodilla formada por tibia, fémur y rótula.
La prótesis de rodilla está formada por dos piezas principales, una que se une a la parte inferior del fémur y otra que se fija a la parte superior de la tibia. Estos dos componentes son metálicos, habitualmente de aleaciones de cromo-cobalto, que se fijan al hueso por medios mecánicos,fijación directa o por medio de cemento quirúrgico. Entre ambos componentes metálicos se coloca una pieza intermedia muy resistente que permite que ambos componentes se deslicen uno sobre otro en los movimientos de la rodilla.
Es recomendable que antes de acceder a este tipo de intervención, el paciente cumpla una serie de condiciones médicas y debe tener claro las complicaciones.
El Dr. Norberto Báez Ríos, es especialista en Reemplazo de Rodillas, Caderas y Cirugía Ortopédica Reconstructiva, cuenta con sobre 10,500 cirugías de reemplazo de rodillas y caderas, más de 20 años de experiencia, ayudando a diagnosticar y tratar problemas de movilidad a sus pacientes.
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